domingo, 13 de octubre de 2013

"La Caída" de Albert Camus -- EXTRACTO --

Por supuesto, el verdadero amor es excepcional, hay dos o tres por siglo aproximadamente. El resto del tiempo hay vanidad o aburrimiento. Yo en todo caso no era la Monja portuguesa. No tengo el corazón seco, sino antes bien, lleno de ternura, y además con lágrimas fáciles. Únicamente ocurre que mis impulsos se tornan siempre hacia mí, mi ternura me concierne. Al final es falso que yo no haya amado nunca. En mi vida he experimentado al menos un gran amor, y su objeto siempre he sido yo. Desde ese punto de vista, después de las inevitables dificultades de la primera juventud, enseguida supe dónde estaba : la sensualidad, y únicamente la sensualidad, reinaba en mi vida amorosa. Solamente buscaba los objetos de placer y de conquista. Además, me ayudaba a ello mi complexión : la naturaleza fue generosa conmigo. Estaba  no poco orgulloso de todo ello y obtenía muchas satisfacciones que no sabría decir si procedían del placer o del prestigio. Bueno, va a usted a repetir que me estoy alabando de nuevo. No lo negaré y me siento tanto menos orgulloso cuanto que en esto me alabo de lo que es cierto.