domingo, 23 de febrero de 2014
A la música. Arthur Rimbaud
A la plaza que un césped dibuja, ralo y pobre,
y donde todo está correcto, flores, árboles,
los burgueses jadeantes, que ahogan los calores,
traen todos los jueves, de noche, su estulticia.
-La banda militar, en medio del jardín,
con el Vals de los pífanos el chacó balancea:
-Se exhibe el lechuguino en las primeras filas
y el notario es tan sólo los dijes que le cuelgan.
Rentistas con monóculo subrayan los errores:
burócratas henchidos arrastran a sus damas
a cuyo lado corren, fieles como comacas,
-mujeres con volantes que parecen anuncios.
Sentados en los bancos, tenderos retirados,
a la par que la arena con su bastón atizan,
con mucha dignidad discuten los tratados,
aspiran rapé en plata, y siguen: «¡Pues, decíamos!...»
Aplastando en su banco un lomo orondo y fofo,
un burgués con botones de plata y panza nórdica
saborea su pipa, de la que cae una hebra
de tabaco; -Ya saben, lo compro de estraperlo.
Y por el césped verde se ríen los golfantes,
mientras, enamorados por el son del trombón,
ingenuos, los turutas, husmeando una rosa
acarician al niño pensando en la niñera...
Yo sigo, hecho un desastre, igual que un estudiante,
bajo el castaño de indias, a las alegres chicas:
lo saben y se vuelven, riéndose, hacia mí,
con los ojos cuajados de ideas indiscretas.
Yo no digo ni mu, pero miro la carne
de sus cuellos bordados, blancos, por bucles locos:
y persigo la curva, bajo el justillo leve,
de una espalda de diosa, tras el arco del hombro.
Pronto, como un lebrel, acecho botas, medias...
-Reconstruyo los cuerpos y ardo en fiebres hermosas.
Ellas me encuentran raro y van cuchicheando...
-Mis deseos brutales se enganchan a sus labios...
martes, 18 de febrero de 2014
MÁRMOLES. Aldo Pellegrini
Nadie podrá olvidar
la voz velada del
arqueólogo en cuclillas
buscando entre
antiguas ruinas
las huellas de la
angustia de los siglos
hundidas en la arena
sólo prosperan las
prostitutas petrificadas
que conservan a
través de los siglos
un inagotable deseo
de amor
la voz velada y
lejana busca lo viviente en lo
muerto
a la sombra de la
voz
la más deliciosa de
las doncellas se desnuda de sus
heridas
piadosamente
cae una noche rota
piadosamente
sopla sobre los
antiguos mármoles
el gran viento de
los acoplamientos
en cada instante
nacen y mueren de un modo
infinito
seres invisibles que
fecundan al tiempo
la voz lejana llama
al misterio
derramado entre los monumentos
arqueológicos
una tempestad de
mordiscos
hace sangrar los
mármoles
sangre coagulada del
tiempo inalcanzable
jueves, 13 de febrero de 2014
PRIMERO LA VIDA (a Philippe Soupault). André Breton
Primero la vida a esos prismas sin espesor así los colores sean más puros
Primero a esta hora siempre gris a esos terribles automóviles de frías llamas
A estas piedras reblandecidas
Primero este corazón trabado
A esta ciénaga de murmullos
Y a este blanco tejido cantando a la vez en el aire y en la tierra
A esta bendición nupcial que une mi frente a la de la vanidad total
Primero la vida
Primero la vida con sus sábanas conjuratorias
Sus cicatrices de evasión
Primero la vida primero esta roseta sobre mi tumba
La vida de la presencia nada más que la presencia
Donde una voz dice ¿Estás ahí? y otra responde ¿Estás ahí?
Ay casi no estoy
Y aun cuando favoreciéramos a aquéllos que damos muerte
Primero la vida
Primero la vida primero la vida Infancia venerable
La cinta que sale de un faquir
Se parece a la barrera del mundo
Pese a que el sol sea un deshecho
Por muy poco que el cuerpo de una mujer se le parezca
Sueñas contemplando detenidamente la trayectoria
O sólo cerrando los ojos sobre la tormenta adorable llamada tu mano
Primero la vida
Primero la vida con sus salas de espera
Cuando uno sabe que nunca será admitido
Primero la vida a estas fuentes termales
Donde el servicio está hecho por collares
Primero la vida desfavorable y larga
Cuando aquí los libros se volvieran a cerrar sobre anaqueles menos suaves
Y cuando allí se estuviera más a gusto que nunca se estuviera libre
Primero la vida
Primero la vida como fondo de desdén
A este rostro suficientemente bello
Como el antídoto de esta perfección que ella pide y teme
La vida ese embuste de Dios
La vida tal un pasaporte virgen
Una pequeña ciudad tal Pont-á-Mousson
Y como todo ya se dijo
Primero la vida
Primero a esta hora siempre gris a esos terribles automóviles de frías llamas
A estas piedras reblandecidas
Primero este corazón trabado
A esta ciénaga de murmullos
Y a este blanco tejido cantando a la vez en el aire y en la tierra
A esta bendición nupcial que une mi frente a la de la vanidad total
Primero la vida
Primero la vida con sus sábanas conjuratorias
Sus cicatrices de evasión
Primero la vida primero esta roseta sobre mi tumba
La vida de la presencia nada más que la presencia
Donde una voz dice ¿Estás ahí? y otra responde ¿Estás ahí?
Ay casi no estoy
Y aun cuando favoreciéramos a aquéllos que damos muerte
Primero la vida
Primero la vida primero la vida Infancia venerable
La cinta que sale de un faquir
Se parece a la barrera del mundo
Pese a que el sol sea un deshecho
Por muy poco que el cuerpo de una mujer se le parezca
Sueñas contemplando detenidamente la trayectoria
O sólo cerrando los ojos sobre la tormenta adorable llamada tu mano
Primero la vida
Primero la vida con sus salas de espera
Cuando uno sabe que nunca será admitido
Primero la vida a estas fuentes termales
Donde el servicio está hecho por collares
Primero la vida desfavorable y larga
Cuando aquí los libros se volvieran a cerrar sobre anaqueles menos suaves
Y cuando allí se estuviera más a gusto que nunca se estuviera libre
Primero la vida
Primero la vida como fondo de desdén
A este rostro suficientemente bello
Como el antídoto de esta perfección que ella pide y teme
La vida ese embuste de Dios
La vida tal un pasaporte virgen
Una pequeña ciudad tal Pont-á-Mousson
Y como todo ya se dijo
Primero la vida
jueves, 6 de febrero de 2014
Aldo Pellegrini, "El huevo filosófico", A Partir de Cero, N° 2 (Buenos Aires, diciembre de 1952)
A la
idea del hombre común de admitir como real solamente las apariencias
sensibles, se opone la idea surrealista de la existencia de aspectos, o
mejor, de planos multiples y variados de la realidad. A la idea de la
percepción sensorial como fuente única del saber se opone la concepción
surrealista del conocimiento, que proclama la existencia de infinitos
contactos entre el hombre y el mundo, escalonados
desde lo sensible a lo suprasensible. El surrealista no quiere
prescindir de ningún aspecto posible de la realidad y como consecuencia,
su actitud frente a los datos parciales de los sentidos y de la ciencia
se revela no conformista...
El surrealista no se resigna, es esencialmente disconformista, y partiendo de principio de que la fuente de todo conocimiento está en el interior del hombre, se sumerge en el propio espíritu, atravezando el plano racional, y allá, en lo mas hondo de su yo, encuentra el mundo...
El surrealismo cree, pues, en una realidad sin limites. Su terreno de investigación es lo desconocido ilimitado. Si al fin el conocimiento resulta de la participación del hombre en el cosmos, es necesario buscar en la mas profunda inmersión en sí mismo la fuente de toda sabiduria...
El surrealismo, consciente de la amplitud de lo real, consciente de que todo sujeto en el centro mimo de esa realidad total, busca en la inmersión en si mismo la fuente de todo conocimiento. Y cuando retorna de su inmersión aparece con el unico lenguaje que puede darle la idea de la totalidad de lo real: el lenguaje poetico.
El surrealista no se resigna, es esencialmente disconformista, y partiendo de principio de que la fuente de todo conocimiento está en el interior del hombre, se sumerge en el propio espíritu, atravezando el plano racional, y allá, en lo mas hondo de su yo, encuentra el mundo...
El surrealismo cree, pues, en una realidad sin limites. Su terreno de investigación es lo desconocido ilimitado. Si al fin el conocimiento resulta de la participación del hombre en el cosmos, es necesario buscar en la mas profunda inmersión en sí mismo la fuente de toda sabiduria...
El surrealismo, consciente de la amplitud de lo real, consciente de que todo sujeto en el centro mimo de esa realidad total, busca en la inmersión en si mismo la fuente de todo conocimiento. Y cuando retorna de su inmersión aparece con el unico lenguaje que puede darle la idea de la totalidad de lo real: el lenguaje poetico.
Tristan Tazara, MANIFIESTO DADA 1918
ASCO DADAISTA
Todo producto del asco susceptible de convertirse en una negación de la familia, es DADA; protesta con todas las fuerzas del ser en acción destructiva: DADA; conocimiento de todos los medios hasta ahora rechazados por el sexo púdico del compromiso cómodo y la cortesía: DADA; abolición de la lógica, danza de los impotentes de la creación: DADA; de toda jerarquia y ecuación social instalada para los valores por nuestros lacayos: DADA; cada objeto, todos los objetos, lso sentimientos y las oscuridades, las apariciones y el choque preciso de las lineas paralelas, son medios para el combate: DADA; abolición de la memoria: DADA; abolición de la arqueología: DADA; abolición de los profetas: DADA; abolición del futuro: DADA; creencia absoluta indiscutible en cada dios producto inmediato de la espontaneidad: DADA; salto elegante y sin perjuicio de una armonía a la otra esfera; trayectoria de una palabra lanzada como un disco sonoro grito; respetar todas las individualidades en su locura del momento: seria, temerosa, tímida, ardiente, vigorosa, decidida, entusiasta; pelear su iglesia de todo accesorio inútil y pesado; escupir como una cascada luminosa el pensamiento chocante o amoroso, o mimarlo-con la viva satisfacción de que da igual- con la misma intensidad en el zarzal, puro de insectos para la sangre bien nacida, y dorada de cuerpos de arcángeles, de su aullido de los dolores crispados, entrelazamiento de los contrarios y de todas las contradicciones, de los grotescos, de las inconsecuancias: LA VIDA.
Todo producto del asco susceptible de convertirse en una negación de la familia, es DADA; protesta con todas las fuerzas del ser en acción destructiva: DADA; conocimiento de todos los medios hasta ahora rechazados por el sexo púdico del compromiso cómodo y la cortesía: DADA; abolición de la lógica, danza de los impotentes de la creación: DADA; de toda jerarquia y ecuación social instalada para los valores por nuestros lacayos: DADA; cada objeto, todos los objetos, lso sentimientos y las oscuridades, las apariciones y el choque preciso de las lineas paralelas, son medios para el combate: DADA; abolición de la memoria: DADA; abolición de la arqueología: DADA; abolición de los profetas: DADA; abolición del futuro: DADA; creencia absoluta indiscutible en cada dios producto inmediato de la espontaneidad: DADA; salto elegante y sin perjuicio de una armonía a la otra esfera; trayectoria de una palabra lanzada como un disco sonoro grito; respetar todas las individualidades en su locura del momento: seria, temerosa, tímida, ardiente, vigorosa, decidida, entusiasta; pelear su iglesia de todo accesorio inútil y pesado; escupir como una cascada luminosa el pensamiento chocante o amoroso, o mimarlo-con la viva satisfacción de que da igual- con la misma intensidad en el zarzal, puro de insectos para la sangre bien nacida, y dorada de cuerpos de arcángeles, de su aullido de los dolores crispados, entrelazamiento de los contrarios y de todas las contradicciones, de los grotescos, de las inconsecuancias: LA VIDA.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)